En el Municipio se desarrolló una capacitación para médicos, enfermeras y bioquímicos de nuestro pueblo sobre todo lo que respecta a la Fiebre Hemorrágica Argentina. El encuentro se llevó a cabo el martes en el salón de actos, con la presencia del secretario de Salud, Ángel Pereyra, quien recibió Susana Demaestri, referente de Inmunizaciones de la Provincia de Buenos Aires, Graciela García, directora asociada de Zona Sanitaria X, Ana Briggiler. Medica en Instituto Maiztegui (Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas) y María Celeste Giner (Epidemióloga). Se dio la parte teórica y práctica de la aplicación de la vacuna Candid #1, contra la Fiebre Hemorrágica Argentina, FHA, localmente denominada mal de los rastrojos o mal de Junín, una enfermedad viral zoonótica, que produce una fiebre hemorrágica viral, endémica en Argentina, causada por el Junin virus transmitido por medio de una especie de roedor, la laucha del maíz o ratón maicero (Calomys musculinus) el cual es su vector natural.
Pudimos entrevistar a los profesionales, quienes nos informaron que esta enfermedad comenzó tiempo atrás en la zona de Pergamino, pero se fue extendiendo y ha llegado desgraciadamente a regiones como la nuestra. La vacuna anteriormente se transportaba en hielo seco solamente, era muy difícil la mantención, pero hoy sacándola de un freezer aún puede mantenerse un mes y es mucho más fácil trabajar con la misma.
Navarro es una zona rural, de cosecha, donde habita el roedor que transporta este virus. El retón maicero es pequeño, de color marrón con la pancita blanca y suelen verse en los tiempos de cosecha, y desgraciadamente muchos trabajadores de zona rural entran en contacto con el virus que emana este roedor que desparrama el virus a través de su saliva, orina, sangre. La infección al humano se produce a través de: contacto con la piel (con escoriaciones), en mucosas, inhalación de partículas portando el virus.
Los especialistas informaron que el caso del vecino Andrés Lochwicz, fallecido por esta cruel enfermedad días atrás, es el 1º 30 años en la región X.
Se puede contagiar también de persona a persona, por lo tanto es riesgoso y es muy importante la prevención, como así también la consulta rápida con el médico, ya que de detectar la enfermedad a tiempo, tiene la posibilidad de tratarse.
No siempre la persona contagiada es porque trabaja o vive en el campo, también corre riesgo cualquier vecino del pueblo, que tiene contacto con el roedor, que se puede encontrar en lugares descuidados, galpones cerrados, leña, pastos altos, lugares donde el roedor pueda anidar.
Comienza con un cuadro insidioso de fiebre, dolores musculares y malestar general. Luego se instalan síntomas como dolor de cabeza, náuseas, vómitos, diarrea o constipación, enrojecimiento de las conjuntivas oculares, taquicardia, hipotensión, hiperestesias, postración, confusión, temblor de manos y lengua, petequias, trombocitopenia, leucopenia y proteinuria.
El Dr. Pereyra informó que desde la Secretaría de Salud informará a la población desde todos los centros de salud, hospital y salas periféricas, y en lugares donde se habilitarán carpas con profesionales de la salud.
Es importante que la población esté informada y que se aplique la vacuna, destinada a personas de 15 a 65 años. No serán vacunadas mujeres embarazadas, mamás que estén amamantando, personas que hayan sido vacunados y no hayan pasado 30 días, o quienes tengan problemas de bajas defensas por diversas razones. De todos modos, siempre lo mejor es la consulta.
Cualquier actitud que antes parecía normal, como acostarse en el pasto, colocarse pastitos en la boca, comer un puñado de girasol en lugares donde esté alojado y no haya tenido un buen plan de desratización, tocar leñas, etc, y no lavarse correctamente las manos, pueden generar inconvenientes con cualquier enfermedad producida por roedores.