Pedido de Publicación

Roberto Gómez
Por Roberto Gómez agosto 12, 2015

Pedido de Publicación

Por este medio quiero agradecer al señor intendente y a todo el personal en general, a bomberos y a toda persona que ayudó  a su vecino en lo que pudo por este desastre del agua. Les quiero agradecer en nombre de mi hija, la ayuda que todos le prestaron, pero también tengo que decir lo injusto: había gente que decía “por culpa del maldito terraplén nos inundamos”, y otras palabras feas contra Santiago. Me lo dijo una persona de este gobierno cuando sacaban gente y llevaban ayuda. Yo a esa gente la comprende porque en la otra inundación perdieron casi todo, y ahora que tenían su casa a fuerza de sacrificio y dinero, el agua le llevó todo y nuevamente a comenzar.

Esto enloquece a cualquiera, pero cuando se tranquilicen un poco y pienses que llovió 350 mm en 4 ó 5 días y no hay salida para tanta agua de golpe, como pasó en otras ciudades o pueblos, como quieran llamarlos, yo lo que digo y conozco algo de esto, gracias al terraplén, no pasó un desastre mayor, porque el terraplén te daba la diferencia del agua de la laguna al del canal de la calle 1. Lo exacto era la terminación del terraplén en la puerta Nº 1.

Del lado de la laguna la ruta se empezó a cortar un poco y del lado del canal (call1 pegado al terraplén), la diferencia era de unos 60 ó 70 cm.

Quiero decir, que si no estaba el terraplén, tendrían el agua hasta el techo y el cura en bote por la plaza. O sea, en vez de hablar mal del intendente por el terraplén, tendrían que venir al Municipio y agradecerle por haberlo hecho, y pedirle si puede haber una solución para el futuro.

Yo recorrí con él la inundación pasada, y la hay, pero también hay problemas por delante. Vayan y pregúntenle a él. Yo no soy quién.

Gracias y perdonen. No quiero ofender. Es mi opinión.

Santiago, me preguntaste en ese recorrido que hicimos qué opinaba del terraplén y to dije, cuando esté terminado te digo. Nobleza obliga: te felicito, perfecto. Pero hay que mantenerlo.

Alfredo Cabral.-

Roberto Gómez
Por Roberto Gómez agosto 12, 2015