Mensaje de la Liga de Madres

Roberto Gómez
Por Roberto Gómez mayo 2, 2019

Mensaje de la Liga de Madres

Con motivo de celebrarse este año, el 60° aniversario de la creación de la Liga de Madres de Navarro, y respondiendo a un pedido de la Comisión Directiva, voy a tratar de plasmar en palabras algunos de mis recuerdos y vivencias durante los 12 años que tuve el honor de ser dirigente (2001-2013).
A modo de anécdota recuerdo que en la primera reunión, la presidente Chola Costa, distribuyó los cargos y de inmediato se formaron las subcomisiones de trabajo. Escuché con admiración que un grupo se encargaba de arreglar la ropa del ropero, otro iba a dar clases de cocina, otro se prepararía la comida cuando se reunían los sacerdotes…y yo nueva y sin habilidad para esas actividades, sentía que iba a ser un fracaso mi actuación dentro de la Comisión. Hasta que escuché: “quién quiere hacerse cargo de prensa y difusión?” En eso me sentí mas cómoda y me ofrecí. Chola me respondió: “qué suerte porque siempre esto es lo menos elegido”.
A partir de ese día y con el compromiso de difundir la labor de la Liga, semanalmente publiqué artículos, pensamientos, reflexiones, comunicaciones, etc., gracias al incondicional apoyo de “Amanecer”, “La Semana”, “Navarro Noticias” y la F.M. 90.5 “La Radio”. También una vez al mes tuve un espacio en La Radio gracias a la buena volundad y generosidad de Alfredo Martínez. Ese espacio era aprovechado para la información y siempre se hacía una lectura de reflexión.
Quiero destacar el gesto y la disposición que siempre tuvieron los medios de comunicación locales, que fueron colaboradores incansables de la Institución.
Pero esa no fue mi única actividad. Cuando comencé a interactuar con un grupo tan dinámico, me dí cuenta que había muchas cosas que podía hacer y participé con mucho entusiasmo dando lo mejor que podía.
Asistí a las reuniones de Liga Arquidiocesana (Mercedes) en las que nos enriquecíamos como institución, además de estrechar vínculos con las comisiones de todos los distritos que corresponden a la Arquidiócesis. Las que asistíamos , trasmitíamos luego en la Comisión, los temas desarrollados.
Visitamos familias, instituciones tales como CADI, Escuelas, Hogar de niños, etc. En la “Semana de la familia” elegíamos una, y le llevábamos una caja de comestibles y alguna otra cosas que sabíamos que necesitaban. Organizábamos el “ té con las socias” y en algunas oportunidades el chocolate del 25 de Mayo o el 9 de Julio.
En los Actos Penitenciales, servíamos la cena a los sacerdotes y lavábamos la vajilla.
En una oportunidad fuimos con Emilce a enseñarles a tejer a un grupo de chicos del Colegio San Lorenzo para que confeccionaran cuadrados para armar mantas para los Vicentinos.
Visitábamos todos los meses el Hogar de ancianos pata compartir con los abuelos unas horas de la tarde.
Armábamos el Arbol de Navidad con los más chiquitos. Invitábamos a las mamás o abuelas para que los kllevaran y al Jardín de Infantes San José.
Semanalmente nos reuníamos en Comisión con la participación del Padre Felipe, nuestro asesor espiritual.
Otorgamos una beca a una niña seleccionada por la Escuela N° 11 como “reconocimiento al esfuerzo” para que pudiera continuar estudios secundarios. La beca consistió en proporcionarle todos los útiles, libros y material que necesitaba, como así también apoyo pedagógico.
El Taller de la 3° edad, con socias, en el que teníamos charlas, lecturas , acompañamiento y rezo del Santo Rosario, una vez por semana.
Conseguimos libros de textos y los regalamos para la biblioteca de la Escuela Agraria.
Saludábamos a las socias con motivo de algún acontecimiento familiar importante: Bodas de oro, nacimientos, etc. También hacíamos llegar nuestra felicitación y estímulo a alumnos que se destacaban en distintas disciplinas.
Organizábamos viajes con las socias a Buenos Aires y San Nicolás.
Invitábamos y acompañabamos a las embarazadas a recibir la bendición y les entregábamos una estampa con oración a Nuestra Señora de la Dulce Espera y les obsequíabamos un par de escarpines también bendecidos.
Interactúabamos con las socias a quienes invitábamos a participar de las actividades y recibir sus inquietudes sin perder de vista nuestro objetivo:” Colaborar con la Iglesia en todo lo concerniente al bien de las familias”.
Conformamos un grupo unido, solidario y comprometido. Guardo hermosos recuerdos de todas las personas con quienes compartí.
Actualmente, como socia, sigo participando del rezo del Santo Rosario de los días martes. Destaco la hospitalidad y generosidad de la Sra. Emilce Elizalde, que brinda su casa para que podamos reunirnos. Trato de asistir a las convovatorias que hace la Comisión con motivo de fechas especiales tales como la Semana de la Familia, y me siento integrada y muy a gusto con la Institución.
En estos 60 años de la Liga, pido a Dios la siga bendiciendo,para que su obra continúe dando frutos en nuestra comunidad.

Roberto Gómez
Por Roberto Gómez mayo 2, 2019

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