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Roberto Gómez
Por Roberto Gómez marzo 24, 2016

POR LOS DERECHOS HUMANOS DE AYER Y DE HOY

JORNADAS POR LA MEMORIA, LA VERDAD Y LA JUSTICIA 

 

A 40 años del golpe de estado cívico-militar-eclesiástico más sangriento de la historia argentina, recuperemos las banderas de la emancipación y el cambio social, sosteniendo las consignas históricas de lucha  que nos representan como trabajadorxs.

Este 24 de marzo exige denunciar y condenar  los brutales caminos de la represión con sus leyes antiterroristas y protocolos anti piquete; del ajuste económico; de los despidos y la caída de ingresos de lxs trabajadorxs y otros sectores populares; de un patriarcado que suma más víctimas de femicidio; de un endeudamiento descomunal que pagará el pueblo (otra vez) mientras se quitan retenciones al agro o se paga la deuda externa fraudulenta.

 

CONTRA LA IMPUNIDAD DE AYER Y DE HOY:
> A 40 AÑOS DEL GOLPE CÍVICO-MILITAR-ECLESIÁSTICO
> A 10 AÑOS DE LA DESAPARICIÓN EN DEMOCRACIA DE JORGE JULIO LÓPEZ:
> ¡30.000 DETENIDOS-DESAPARECIDOS PRESENTES!
> ¡FUERA OBAMA, REPRESENTANTE DEL IMPERIALISMO QUE FINANCIÓ Y GESTÓ LAS DICTADURAS DE NUESTRA AMÉRICA!
> NO OLVIDAMOS, NO PERDONAMOS, NO NOS RECONCILIAMOS.

Repudiamos toda perspectiva de “dar vuelta la página” por considerarla un atropello riesgoso para los sectores interesados en avanzar hacia un cambio social y una sociedad verdaderamente democrática.

Desde el retorno de la democracia en el ´83 hasta la fecha, la lucha contra la Impunidad, por la Memoria, la Verdad y la Justicia, así como la lucha por visibilizar la profunda fragmentación del campo popular realizada por el Terrorismo de Estado en nuestro país, ha sido continua.

No sólo son 40 años del golpe de Estado más sangriento de la Historia Argentina, son también los 40 años de la lucha sin descanso del pueblo argentino contra quienes diseñaron, financiaron y ejecutaron el Plan Cóndor en nuestra región Latinoamericana. Y contra quienes han sido no sólo cómplices, sino miembros activos del Terrorismo de Estado en la sociedad civil.

Por eso es que hablamos no sólo de golpe militar, sino que señalamos la participación activa de las empresas multinacionales (FIAT, TECHINT, Mercedes Benz, Ford, Ledesma, entre otras patronales industriales y agropecuarias) y el poder eclesiástico (fracciones históricamente comprometidas en la proscripción del peronismo, en los sucesivos golpes que interrumpieron la vida democrática en nuestro país, y en la represión ilegal de los sectores populares y las fracciones tercermundistas de la Iglesia que desde finales de los años ´60 se había acercado a las luchas populares de su tiempo).

Son también 10 años de la desaparición en democracia de Jorge Julio López, ex detenido desaparecido, sobreviviente y testigo clave del juicio que condenó al genocida Miguel Etchecolatz en La Plata. Desaparecido (por segunda vez) durante el proceso judicial en 2006.

Desde el retorno de la democracia, el frente de lucha por los Derechos Humanos (Madres, Abuelas, Hijos e Hijas de detenidos-desaparecidos y sobrevivientes de los campos de concentración), con sus avances y retrocesos, abonó el camino de la memoria colectiva contra el Olvido y el Silencio. Nuevas generaciones y nuevas luchas por cambio social durante estos más de 30 años de democracia, dejan un balance insoslayable: ¿Qué democracia tenemos? ¿Qué democracia queremos?

 

Es por eso que hoy repudiamos enérgicamente el arribo de Obama, paladín de la hipocresía imperialista y sus cruzadas por “democracia y libertad”, mayor representante del terrorismo para con los pueblos del mundo. Que pise nuestro suelo manchado con sangre que ellos mismos derramaron –formando represores en la Escuela de las Américas- es toda una demostración de un proyecto político de derecha que hoy nos gobierna y de una política mundial perversa de invasión, saqueo y despojo para la acumulación capitalista de los países centrales y el aumento del empobrecimiento de nuestros pueblos.
Obama gira por Argentina en un contexto político de nuevo pago de la fraudulenta e ilegítima Deuda Externa, por parte del “macrichnerismo”, mientras ajustan el bolsillo del pueblo trabajador y recortan presupuesto en sectores públicos como Salud y Educación. Nos visita mientras ejecutan el ajuste. Un nuevo pago de la misma Deuda Externa catapultada en su monto por la última dictadura, sostenida y profundizada por los sucesivos gobiernos democráticos, -cuyo endeudamiento desembocó en la crisis económica más profunda de nuestra historia en 2001- muestra a las claras la continuidad tanto de una “democracia” atada a los intereses multinacionales, así como también la de la represión ilegal, cuyos organismos, tanto en democracia como en dictadura, se presentan intactos y desplegados en todo su vigor contra las organizaciones de lucha de nuestro pueblo trabajador.

Que el presidente de EEUU pise Argentina mientras pagan más deuda y dentro del contexto de las movilizaciones populares por el 24 de Marzo no es casualidad, es una provocación y demostración de fuerza, por parte de quienes nos gobiernan: el protocolo antipiquetes, las leyes antiterroristas, la represión y persecución político-ideológica.

Porque tampoco se puede sopesar que son también 40 años del régimen político que marcó el rumbo económico hasta la actualidad, con niveles de endeudamiento sin precedentes, la atadura de nuestra economía al capital financiero internacional y la apertura de nuestros sectores productivos al saqueo descomunal de las multinacionales. Mientras crece el tendal de despidos o se reducen las raciones del comedor de las escuelas públicas o los cupos, Argentina paga y se endeuda más tal cual lo hizo desde el retorno de la democracia.

A 40 años del inicio de la última sangrienta dictadura militar y a 33 años del retorno de la Democracia Representativa con la que no se come, se educa ni se cura, es que decimos Nunca Más. Con los mismos métodos que la experiencia popular nos dejó en las jornadas de 2001. Con el mismo horizonte de una sociedad sin explotados no oprimidos. Sólo con democracia directa desde las bases, con organización y lucha por nuestros reclamos podremos garantizar los Derechos Humanos en el presente y sin anacronismos: mientras haya un solo hijo o hija de este pueblo que no tenga acceso a una vivienda digna, a una educación pública, laica y gratuita, a una alimentación y trabajo digno; la lucha de los 30.000 compañeros detenidos-desaparecidos de nuestro pueblo aún no termina.

Gisela Marchiolo
Sergio Santana.

Roberto Gómez
Por Roberto Gómez marzo 24, 2016

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