A pesar de la derrota, estos pibes nos devolvieron la ilusión
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La Selección Argentina no pudo superar a Alemania y es así, porque si tenés las mejores opciones y fallás en la definición frente a un gigante del mundo, corrés el riesgo de perder el partido. Es verdad que no nos cobraron un penal. En el 90 y hoy contra Alemania un poquito nos perjudicaron. Porque todo podría haber cambiado con un gol argentino. Igual estuvimos muy cerca por mérito propio y nos quedamos afuera por no saber definir las grandísimas oportunidades que el rival nos ofreció. Dos mano a mano increíblemente errados. Alemania es un gran equipo, jugó más coordinado en ataque, aunque en defensa falló bastante. Argentina, salvo la jugada final, defensivamente fue sólida y arriba falló en los momentos justos. Da bronca, mucha bronca, pero también estos muchachos nos dan mucho orgullo porque son pibes que no necesitan dinero, que fueron no sólo por su gloria sino por la de un país exitista como pocos, donde si ganás sos un genio y si perdés son un desastre. Por ahí Alemania tiene cierta ventaja, porque juegan todo el año juntos, hay 7 en el mismo equipo y todos en el país, sin tener que dejar sus seres queridos, ordenados, como el resto de su gente. Nosotros nos juntamos para un Mundial y hay que armar juego en 20 días. Por eso es demasiado lo que conseguimos, por más que nos duela. Gracias muchachos, por todo lo hecho, no hay ninguna duda que ustedes nos abrieron la capacidad de ilusionarnos, algo que en Argentina cuesta bastante.
