Aquí el discurso del Micaela Villverde, en el acto del 25
Artículos relacionados
Las palabras alusivas al 204º aniversario de la Revolución de Mayo estuvieron a cargo de Micaela Villaverde, directora de Juventud, quien hizo referencia al hecho histórico y a su vez una descripción de hechos sobresalientes de las gestiones nacionales y municipales de la actualidad.
http://youtu.be/_gVYMUB5WUc
ESTO FUE LO QUE DIJO
Los días como éstos, de alguna manera renuevan lo que sentimos hacia nuestra Patria, hacia nuestra Nación, nos acercan los unos a los otros, nos hacen reconocernos y sentirnos más argentinos. Mientras pensaba en qué decir hoy, me preguntaba por lo que simbolizó el 25 de mayo de 1810 en nuestras vidas y en cómo su significado se actualiza año tras año, cuando han pasado más de dos siglos.
Pensar en la Patria es también pensar en las costumbres que nos unen, en la historia común que nos atraviesa, en el Obelisco, en la calle más larga y el río más ancho, en el dulce de leche, en el Che, en Maradona, en Gardel; como dice Bersuit en su canción “Argentinidad al palo”; es pensar también en una de las primeras frases que actuamos en el jardín y se graban a fuego en nuestras identidades: “mazamorra, mazamorra para curar la memoria”; o “el pueblo quiere saber de qué se trata”.
Hay quienes piensan que aquél día (25/05/1810) fue una revolución y también quienes creen que, en realidad, fue el comienzo de un proceso que acabó por modificar las condiciones de vida durante el virreinato, tanto en términos sociales, como culturales, económicos y políticos; que cobraron mayor visibilidad durante la década siguiente.
En este sentido, lo que conmemoramos hoy como “Revolución de Mayo” se inició como un cambio de gobierno (que destituía al Virrey y proclamaba a Cornelio Saavedra como Presidente de la Primera Junta). Es a partir de este momento que comienza la verdadera revolución, cuando poco a poco los “súbditos de la monarquía” reclaman el ejercicio de su ciudadanía. Recordemos que unos años después, en 1813, los títulos de nobleza son abolidos en nuestro territorio.
Un conocido historiador Eric Hobsbwam, decía que “Las revoluciones son consecuencia de procesos históricos y de construcciones colectivas. Para que una revolución exista es necesario que haya una nueva unión de intereses frente a una vieja unión de éstos”.
Así, en los orígenes de nuestra patria encontramos a la política como el espacio para la transformación, como el lugar que empodera al pueblo. Un pueblo, o un espacio público, que entrado el siglo XX comienza a ampliarse: primero a todos los hombres –¿se acuerdan de la Ley Sáenz Peña de 1912 y el sufragio universal, obligatorio y secreto?-; luego a las mujeres, impulsado por Eva Perón en 1951; y el voto joven, promovido el año pasado por nuestra Presidenta, CFK.
En nuestros días, las nociones de Juventud, Pueblo, Revolución recobran con fuerza el valor de cada una de sus significaciones. Los navarrenses estamos atravesando hoy importantes revoluciones de diversa índole, locales y nacionales. En especial, nuestra querida ciudad parece estar despertándose de una década de estancamiento, y una vez más, los jóvenes tienen un fuerte protagonismo en los rumbos que está tomando Navarro.
Claro que, como dice la abuela, los cambios no ocurren de la noche a la mañana. Sabemos que toda transformación necesita de una sumatoria de hechos cotidianos, como en mayo de 1810, sólo que en esta época las transformaciones son más veloces!
A mí me maravilla, me resulta admirable ver cómo nuestros jóvenes toman la iniciativa de realizar actividades recreativas, culturales o deportivas con el fin de alcanzar sus proyectos, sus metas, sus sueños: terminar los estudios secundarios, a base de esfuerzo y de dedicación; estudiar una carrera terciaria o universitaria, a pesar de las dificultades que conlleva el desarraigo o la escasa frecuencia de un transporte que cubra plenamente sus necesidades.
Hoy nuestros jóvenes asisten a una patria inclusiva, que los convoca a ser parte de este cambio; a diferencia de la década del ’90, donde como se decía, “los jóvenes estaban perdidos” y las políticas de Estado desaparecían en favor de las políticas de mercado, que eran un espacio con lugar para unos pocos.
Los programas y políticas públicas de la última década llegan a nuestra ciudad gracias a un Estado que incluye y a un municipio que está abierto al diálogo y a la participación. Así, gran cantidad de vecinos son incluidos a través de la Asignación Universal por Hijo, que tiende a equiparar los accesos; y no a promover la procreación al infinito, sino que ésta garantiza la presencia de los chicos en la escuela, y sus controles médicos.
Otra de estas políticas es Conectar Igualdad, mediante la que cientos de jóvenes tienen la posibilidad de tener su computadora con el fin de profundizar la educación y las competencias de nuestras generaciones jóvenes. Podemos mencionar otras que también llegan a nuestra ciudad y le dan forma a esta patria inclusiva de todas y de todos: Progresar, Procrear, Fines, Más y Mejor Trabajo, Argentina Trabaja, entre otras.
Estas políticas no sólo revolucionan la vida de nuestros jóvenes, sino que hacen foco en la importancia de la ciudadanía participativa; y ése es otro de los cambios importantísimos a los que asiste Navarro. Hace tiempo atrás nos unimos y nos organizamos por el mal estado de una ruta y de manera conjunta con la gestión del intendente conseguimos el arreglo que está hoy en proceso. Cuando llueve y el agua nos juega malas pasadas, allí está cada vecino- sin distinción de banderas ni de colores- arrimando el hombro para salir juntos adelante.
También, desde el municipio logramos hacer reestructuraciones edilicias en nuestro hospital, porque sabemos que es el primer receptor de salud por el que vamos a pasar si tenemos algún inconveniente físico. Otra acción importante que pusimos en marcha es la de invertir en el área de medio ambiente, entendiendo que es indispensable la construcción de una planta de residuos sólidos y urbanos.
Contamos, además, con un poder legislativo local que entiende que la unión hace la fuerza y asume su rol de defender al pueblo haciendo política, cada vez que desde el mercado se intenta someterlo. Un claro ejemplo de ello es la denuncia contra Cablevisión. Ustedes se preguntaran por que menciono esto, estos son actos de solidaridad, pero sobre todo, de justicia social que hacen a una patria libre y soberana.
Todo esto nos impulsa a ir por más, a crecer juntos, a seguir aunando esfuerzos, a participar activamente de una ciudad, de un municipio en tiempos de cambios. Estamos llamados a seguir trabajando, sabiendo que nos falta mucho por construir y transformar, pero que, como en aquél 25 de Mayo, ya comenzamos la revolución por una patria liberada, por un pueblo soberano.
Por aquellos años, Mariano Moreno (Secretario de la Primera junta, abogado y periodista) escribía que “El mejor gobierno, forma y costumbre de una Nación, es aquel que hace feliz al mayor número de individuos… Las fortunas asignadas a pocos individuos, a proporción de lo grande de un estado, en nada remedian las grandes necesidades de los infinitos miembros de la sociedad”. De esta manera, hoy más que nunca debemos defender y profundizar las conquistas alcanzadas por nuestro pueblo. Que sean eternos los laureles que supimos conseguir ¡Viva la Patria!
Micaela Villaverde, Directora de Juventud.
